La ducha

Una ducha es un placer
más, si tú estás mujer
la cosa cambia de signo.
Cuando abres la mampara
la toalla cae libre de tu piel
brillan mis ojos, corren mis dedos
para tenderte la mano
la tuya, sobre la mía se posa
es autentica poesía se me eriza el sentimiento
una pierna tuya , dentro la otra empieza a pasar,
eterno es ese momento
Tu suave piel y tu aroma, me hacen ronronear.
¡Ya estamos dentro los dos!
Se me agita el corazón
ya no tengo pensamiento
cualquier emoción voló
sólo queda este momento
sólo queda nuestra unión.
El rozarse de los cuerpos
el abrazo salvaje y tierno
suave, docto y candente.
Poso mis dedos como nubes
en tu hombro, sin dejarte de mirar
es el instante crucial
donde a tu mar yo me arrojo
dentro de tus bellos ojos.
Tu espalda ahora me guía
no hay prisa, ni la había
mis dedos recorren tiernos
esa bella orografía.
Llego a tu cintura, ahora,
de grácil línea curvada
y como en cuento de hadas
mis manos haces magnéticas,
me hipnotiza tu sonrisa
tus facciones bien perfectas
y ese mohín de niña
que me pones cuando sueñas.
No puedo más que besarte
no quiero más por ahora
que humedecerme en tus labios
jugosos cual amapolas,
mordisqueo con cuidado
de orfebre tus tiernos labios
mi lengua va despuntando
y se desliza ya alegre
por las perlas más hermosas
eso que llamamos dientes,
más es leve el movimiento
pues, me viene a saludar
la tuya ,húmeda, desde dentro
de tan dulce paladar
que enroscadas, las dos juntas
no se quieren separar.
El agua sigue corriendo
se vierte tras nuestros cuerpos
intuyo su movimiento
pero, es tan dulce amar
que pasados varios cientos
nosotros seguimos igual
tapándonos nuestras bocas
sin dejarnos respirar
cambiando nuestros fluidos
¡qué sabor tan especial!
T e acaricio ya la nuca
tu pelo ensortijado se me enreda
¡maravilla! Entre las manos
Sin dejarnos de besar
mis manos en tus caderas
se han ido hasta posar,
las caricias se repiten
y noto como transigen
y se posan en tus nalgas
redondo y duro , me estremece,
placer su tacto merece.
Te atraigo hasta mis caderas
y tu me aprietas sin suelta
estamos ya tan unidos
que me pareció un latido
de corazón y no dos.
¡Qué saber! las manos pones
sobre todo, en mis pezones
yo, te imito por igual
y sin dejar de besar
a tus pechos yo he llegado
redondos, tibios, dorados
de tacto, celestial cielo
que no he de encontrar consuelo
si ahora mismo no los beso
me arrodillo ya hasta ellos
y sin quitarte los dedos, de ellos
ya succiono como un niño
¡no! Con mucho más cariño
pues, rodeo con mi lengua
tu duro pezón erecto,
vueltas y más vueltas doy
hasta casi, que me estallan
es que me piden batalla
y los vuelvo a succionar
ahora uno, luego el otro
más y más, hasta oírte jadear.
Que por extraño motivo
tu pelvis ya se ha movido
se comienza a columpiar.
Bajo mi mano hasta tu dulce racimo
que con labios encendidos, mojada ya,
tu me quieres regalar,
la acaricio con dulzura
gimiendo, estallas en locura
crispas tu cuerpo de hada
y vuelves desmadejada
entre mis brazos fornidos
que te esperan, amor mío,
y te llevo hasta la cama
donde besaré tus pies
y en cada dedo estaré
enamorando a mi amada.
Descansa ya, amor mío
el calor de mi cuerpo
se tiende para abrazarte,
sentirte en cada poro
el amor que diste antes.
Shiii...buenas noches mi amor(susurrando).