Voy a soñar
Voy a soñar
¡Si! Eso es
soñar es tan bonito. Sobre todo,
si son hermosos los sueños
o agradables, tranquilos, amorosos
románticos
la aventura, a mi me gusta más,
o tal vez, lo insólito, lo inesperado
eso si, soñar dormido, donde
no podamos controlar, o si
nuestros sueños
donde nuestra fábrica de imágenes
se disparan hacia lo absurdo unas
veces, donde nuestro inconsciente
derrama en error continuo
sobre el fuego de nuestra mente
la nata desgarrada del líquido lácteo
uno detrás de otro sin pausa
casi todos unidos a nuestros problemas,
inquietudes, deseos
volcados en imágenes,
un deseo una imagen, un problema, otra
o una sucesión de ellas, pero
ustedes ya lo saben
a veces una solución u otra
idea escondida en un color
en un abstracto, en un olor o una
sensación
pero, esta vez soñaré en amarillo
¡Eso es! En amarillo,
en una sensación amarilla
en un aroma amarillo
en un tacto amarillo
en un sabor amarillo
en un saber amarillo
en una luz, eterna luz.
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